Cuando los bebés comienzan a caminar surge una nueva etapa en la relación con ellos. Sus necesidades de movimiento y exploración son mayores y desde el yoga de mamás y bebés grandes nos adaptamos a ellas.

En estas clases exploramos el movimiento, el espacio y el propio cuerpo desde el juego, la canción y las diferentes posturas de yoga. Permitimos el movimiento libre del bebé mientras le animamos a participar en las actividades junto con mamá o papá, para disfrutar juntos de las diferentes posturas.

A través del movimiento favorecemos el desarrollo psicomotor de los niños y niñas proponiendo pequeños retos que les ayudan a conocer su cuerpo y sus posibilidades de acción, desde una perspectiva de amor, confianza y respeto.

Los adultos entramos en el terreno del juego, desde el que podemos comunicarnos con los bebés desde un canal diferente. Hacemos yoga mientras jugamos y compartimos con ellos. De esta forma aprendemos a adaptarnos a las necesidades cambiantes de nuestras hijas o hijos sin perdernos a nosotras mismas.

A lo largo de los diferentes momentos de la clase, los bebes experimentan diferentes estados, van descubriéndose a sí mismos y a los demás en la acción y en la calma, y van aprendiendo a adaptarse al medio que les rodea y a las demás personas, sintiéndose seguros al estar cerca de papá o mamá.

A través del yoga los niños y niñas van ganando confianza en si mismos, van descubriendo sus límites y posibilidades, van conociendo los espacios de calma y de acción y fortalecen aun más el vínculo ya creado con su mamá o papá.

• Mamá
• Favorece la recuperación tras el parto
• Previene y mejora dolores derivados de la crianza (bebé en brazos, mañas posturas...)
• Se genera un lugar de encuentro seguro con otras familias en el que poder compartir las luces y las sombras de la crianza
• Mejora el suelo pélvico 
• Ayuda a soltar tensiones y a encontrar un estado de calma
• Te ayuda a conectar contigo 
• Bebé,
• Permite la exploración del mundo en un entono seguro
• Le ayuda a experimentar diferentes estados, acción, calma, concentración, diversión...
• Fortalece el vínculo con mamá o papá
• Le acerca poco a poco al aprendizaje de la relajación
• Fomenta su desarrollo (sin forzar) a todos los niveles